El Museo Municipal de Rafael Freyre ocupa el local de la vivienda de la familia Buñuelo. Formada por un solo nivel, construcción de madera perteneciente a la arquitectura del siglo XX, el tipo de pared es machihembrado, sufriendo modificaciones en su estructura interna como la ampliación de la sala.

Al conocerse en el territorio la necesidad de un inmueble para constituir un museo, la familia Buñuelo aporta su vivienda en concepto de permuta para crear el Museo Municipal. Comenzando la restauración en abril de 1982, pero no es hasta el 18 de febrero de 1983 que abre sus puertas al público. La institución adquiere el nombre de Rafael Freyre Torres, combatiente del M 26-7 y mártir del asalto al Cuartel Carlos Manuel de Céspedes.